La Voz de Ituzaingó aportó el tipiado y digitalización del libro, autoría de Rolando Goyaud con colaboración del profesor Ricardo Castillo.

1. PREHISTORIA


INDICE
ITUZAINGO. PREHISTORIA. CARACTERES GEOGRAFICOS, GEOLOGICOS Y PALEONTOLOGICOS DE LA ZONA.
FLORA Y FAUNA.
CORRIENTES DE POBLAMIENTO Y HABITANTES PRIMITIVOS.
RIO RECONQUISTA.

CARACTERES GEOGRAFICOS
La zona que habitamos corresponde a la extensa llanura pampeana, que al norte y este del río Salado presenta ondulaciones a diferencia del resto que se caracteriza por ser una inmensa planicie.
Hace 60 millones de años, en plena Era Cenozoica, aparecieron las hierbas en esta zona. El suelo bastante uniforme y parejo estaba cubierto por una capa de humus que aún conserva una suave inclinación hacia el mar.
El norte, este, centro y sudeste de esta llanura se caracteriza por la abundancia de ríos y arroyos. Se destacan el Salado, el Luján, de las Conchas (Reconquista) y Matanza, con lluvias bastante frecuentes e índices pluviales entre 500 y 1000 milímetros anuales que son el origen de la abundancia de hierbas y pastos.
En tanto en la época de la conquista, estas regiones presentaban una desolada extensión cubierta de pastizales, en la que escaseaban los árboles.
El predominio de planicies, la cercanía con el mar y la ausencia de árboles favorecieron que fuertes vientos surcaran la región, limpiando regularmente el aire por lo que a su influjo los primeros españoles denominaran a la región “buenos aires”.
Estos son: el Pampero, un viento seco y fresco que sopla del sudoeste provocando descenso de la temperatura y aumentando el nivel delas aguas en el Río dela Plata. El otro conocido como Sudestada es un viento oceánico, frío y húmedo, proveniente del sudeste y que cuando sopla durante varios días hace crecer el Río dela Plata inundando su ribera.

CARACTERES GEOLOGICOS
La constitución geológica de la llanura pampeana, se caracteriza por ser un área de hundimiento y acumulación a partir del fraccionamiento de una plenillanura, de edad secundaria, cuyas partes centrales comenzaron a hundirse.(1)

Hacia el período geológico conocido como Mioceno, esta  inmensa llanura se había convertido en un mar de poca profundidad denominado Paranaense. Luego con la sedimentación o la meteorización de las montañas vecinas, llegó a formarse densas capas acumuladas en las zonas hundidas. Esta sedimentación no es homogénea sino que presenta varios niveles o pisos, cada cual representa épocas distintas.(2)
Para su estudio han sido clasificados en dos series:
-el más profundo llamado Araucano el cual resulta  más antiguo, correspondiendo al período Plioceno de la Edad Terciaria.
-el segundo denominado Pampeano, se encuentra ubicado por arriba del Araucano y corresponde al período Pleistoceno de la Edad Cuaternaria. A este corresponden los hallazgos arqueológicos y paleontológicos en la denominada formación pampeana.
Esta formación cubre la llanura central de nuestro país y comienza a muy pocos metros de la superficie del suelo que habitamos, no bien termina la tierra vegetal. Está constituida preferentemente por tierra de color rojizo que a veces se presenta como polvo y que se lo denomina Loess.
Este Loess es de origen fluvial o lacustre y ha llegado a depositarse sobre la superficie del suelo, trasladado por el agua. Pero hay otro Loess de clima seco, transportado por efecto del viento.
Esta diferencia, que se puede observar en la calidad del sedimento, permite reconocer en el período Pleistoceno, la fase glacial o pluvial y la fase interglacial o interfluvial.(3) De este modo las variantes climáticas se expresan a través de la sucesión alternada de sedimentación húmeda y sedimentación seca. Esta formación pampeana se complementa de arenas, cenizas volcánicas y compactos calcáreos conocidos como toscas.
Las capas de sedimentos también llamados pisos forman una serie de cuatro niveles. El más profundo y por ende el más antiguo es conocido como Ensenadense y al igual que el Bonaerense que se encuentra ubicado arriba de este en forma inmediata, pertenecen a la Edad Terciaria. Luego el piso siguiente y hacia arriba es el llamado Chapadmalense que corresponde hacia fines del período Pioceno de la Edad Terciaria.
Más reciente se ubica el piso Lujanense correspondiente al Pleistoceno superior y por último, correspondiente al período geológico reciente corresponde el piso llamado Platense que concluye hacia arriba la serie pampeana.

CARACTERES PALEONTOLOGICOS
La Argentina es uno de los países donde mayor cantidad de hallazgos de restos humanos industriales y fosilizados se han encontrado.
Para el conocimiento de la vida en tiempos prehistóricos, resulta imprescindible, estudiar los testimonios de un pasado remoto, restos óseos, líticos y cerámicos.
Estos restos se hallan bajo la superficie del terreno, por ello para su clasificación y cálculo de antigüedad resulta vital la profundidad en que son hallados.
En el estudio de la estratificación del suelo y de cada capa del mismo donde se encuentran estos restos prehistóricos se puede saber la antigüedad aproximada, como también las características del medio ambiente al cual correspondía (4).
Pisos en la llanura bonaerense. Michenzi, 1996.

(1)    La formación de una Plenillanura es un proceso geológico en el cual la superficie de una llanura es modificada al ser elevada por movimientos internos de la Tierra. Los ríos de origen fluvial aumentan considerablemente su profundidad y tendrán laderas abruptas. En las regiones húmedas como la pampa bonaerense, las vertientes se irán destruyendo, hundiendo su nivel y aplanando nuevamente la superficie. Las corrientes de los ríos se tornan entonces lentas.
(2) El fenómeno de meteorización consiste en una serie de procesos mecánicos y químicos que descomponen las rocas y el suelo. El clima tendrá un rol fundamental. Los cambios de temperatura, las precipitaciones y la acción del hielo son factores mecánicos claves en la meteorización; en tanto la combinación de ácidos débiles del agua con minerales y el dióxido de carbono con agua son entre otros, los factores químicos de este proceso.
(3) Los fenómenos de enfriamiento de la corteza terrestre son conocidos como glaciaciones. El período Pleistoceno se caracteriza por la sucesión de épocas de climas fríos y templados, y sus repercusiones fueron las más profundas sobre la distribución y la evolución de la fauna y la flora. Ello nos permite dividirlo en siete subperíodos consistentes en cuatro glaciaciones y tres interglaciaciones. Esta escala que podemos reconocer principalmente en las rocas, proporciona un sistema cronológico que permite ubicar la antigüedad de los restos hallados, como también recrear el clima al cual pertenecían.




FLORA
La llanura pampeana estaba poblada por hierbas de poca altura y se caracterizaba por la falta de árboles. Los españoles testimoniaron la inexistencia de árboles y la presencia de grandes pastizales y juncos en las zonas ribereñas.
El cuadro fitogeográfico correspondía a una inmensa pradera con pastos gramíneos, parajes bajos y húmedos con juncos, cañadas y cortaderas. Parte de ella era una estepa arustiva con jarilla y vegetación xerófila.
En la zona boreo occidental, con temperatura suave y agua abundante las floraciones eran hidrófilas y de ellas las más comunes las herbáceas. De las muy escasas leñosas predominan macachín amarillo, vinagrillo, pasto dulce, etc.
En las inmediaciones de la ribera del Río de la Plata de norte a sur, con suelos arenosos y con bancos de conchillas subfósiles, existieron algunos talas, espinillos, coronillos colorados, a veces el ombú, etc.
En los sitios bajos, cañadas, bañados y los habitualmente anegados por las aguas, las especies más comunes eran: totoras, espadañas, juncos, duraznillos, paja gallo, trébol criollo, aspiltillo, etc.
La flora tipo paranaense se encuentra en los islotes del delta del Paraná y a lo largo del estuario del Plata hasta el cabo San Antonio. Las especies autóctonas eran los cardos y chamicos. Pero las que en su mayoría fueron arrastradas por las aguas desde el Paraguay  y Uruguay eran ceibo, sauce criollo, laurel, palo amarillo, espinillos, cortaderas, etc.

FAUNA
Hace 200 millones de años, a comienzos del período triásico, los mamíferos comenzaron su evolución a partir de reptiles mamiferoides. Los sobrevivientes de la grave extinción ocurrida hacia fines del período cretácico, hace 65 millones de años tenían un peso inferior a los 8 kilos. Tras la desaparición de los dinosaurios y posteriormente durante el cenozoico, hace más de 50 millones de años, los mamíferos se diversificaron recolonizando la Tierra.
Ñandú. Habita en campos abiertos. Su carne era apreciada por los querandíes.

La escasez de gran vegetación en la llanura pampeana impidió el desarrollo de las grandes especies herbívoras, como el dinosaurio. En cambio habitó el smilodon bonaerense, un mamífero carnívoro de cuerpo flexible con grandes garras y fuerte dentadura con caninos largos y resistentes por lo que también fue llamado diente de sable.

Glyptodon. Habitó la zona hace 45 millones de años. Mamífero herbívoro tan grande como un rinoceronte. Se extinguió hace 10.000 años. Su caparazón formada por placas óseas circulares lo protegían del Smilodon. A 300 metros del Río Reconquista se encontró un fósil de Glyptodon que está en el Museo de La Plata. Ilustración: Ciacciarello, 1996.

A 300 metros del río Reconquista se encontraron restos de glyptodon, cuyos fósiles se encuentran en el Museo de La Plata, Buenos Aires y que se extinguió hace 10.000 años. Era un mamífero herbívoro de hasta 4 metros de longitud, semejante a un armadillo gigante. Su caparazón rígido estaba cubierto de placas. La cabeza estaba protegida por un casquete y la cola tenía forma de tubo. Poseía una falange en cuya punta se insertaba una uña que servía para arrancar las raíces que constituían su alimentación principal.

En la época de la conquista ya se encontraban guanaco, vizcacha, zorro, zorrino, liebre, ciervo, venado, gato montés, jaguar a los que los querandíes solían cazar con boleadoras, gato pajero porque improvisaba su guarida entre matas y pajonales, peludo, mulita, carpincho, coipo (nutria), comadreja, perdiz, martineta, pato, ñandú, tero, carancho, chimango, gavilán, lechuza, hornero, zorzal, calandria, jilguero, tordo, torcaza, chingolo, ampalagua, víbora coral, cascabel, de la cruz, lagartija, serpiente, tortuga, sapo, rana y escuerzo.
Las aves se originaron probablemente en algún grupo de reptiles hace 200 millones de años, en el período jurásico de la era Mesozoica siendo los únicos organismos con el cuerpo cubierto de plumas.
La garza blanca es mencionada en 1528 por Luis Ramírez, compañero de Gaboto: “que con ellas se podían henchir tres navíos”. Esta especie era muy abundante a fines del siglo pasado en los grandes cañadones que constituían la zona inundable de Buenos Aires.
Los querandíes cazaban coipos (myocastor) conocidos como nutrias. Los que incursionaban tierra adentro cazaban ñandúes y ciervos pero los que frecuentaban las orillas de los ríos (Reconquista, Riachuelo de los Navíos, Luján y Carcarañá) se alimentaban de peces y nutrias, las que juntamente con venados les proporcionaron pieles para confeccionar mantas. Los españoles encontraron gran cantidad de cuero de coipos sobados a mano en un campamento querandí, tras una escaramuza provocada para obligarlos a suministrarles permanentemente víveres en su primer asentamiento en Buenos Aires.
Además de ciervos, venados, ñandúes y peces,
 los aborígenes se alimentaban también de colpos "nutrias".
 Los españoles encontraron cueros de coipos
sobados en un campamento querandí.

Las mulitas proporcionaron buen alimento a los aborígenes. Una vez cazadas las asaban dentro de su caparazón. En el siglo XVIII el padre Paucke describía la preparación de un tatú: “Después que los indios han deshecho con las boleadoras la cabeza del animalito y lo han destripado, lo colocan cerca del fuego junto con la cáscara y asan primero el lomo y los costados. Ellos hacen con el dedo la prueba si está terminado de asarse, castañetean con la uña o golpetean con el dedo encima sobre la cáscara, si suena hueca ya basta entonces. Luego lo colocan de espaldas y echan brasas enrojecidas sobre el vientre hasta que basta. Luego le arrancan del lomo la cáscara en donde queda una sopita sabrosa que se come con apetito” (Paucke F. “Hacia allá y para acá”).
Smilodon (diente de sable). Mamífero carnívoro de cuerpo
 flexible con grandes garras y largos caninos. 

En el plioceno de las pampas, que se extendió entre 5.000.000 y 1.800.000 años, vivió el protohydrochoerus, un carpincho gigantesco de hábitos  corredores.
El hallazgo de restos fósiles permitió reconstruir la historia evolutiva de los hidroquéridos y establecer que formaron una familia autóctona de América del Sur y originaria de Argentina. Tanto su carne como su cuero eran muy apreciados por los aborígenes pampeanos.
La vizcacha también llegó a integrar la dieta de los aborígenes pero, las vizcacheras constituían trampas en cuya tierra floja solían meter las patas los caballos. Por eso los querandíes cuando adoptaron los caballos diseñaron el tipo de estribo llamado “estribo pampa” que consistía en un simple nudo de tientos o un palito atado por el medio a la estribera sobre los que se afirmaban los dos primeros dedos del pie. Si el caballo rodaba el jinete salía despedido sin quedar enganchado y apretado por el animal.
Los tucu-tucu del género ctenomys, son roedores de las que existen más de cincuenta especies, remontándose su origen desde el período cuaternario hasta el plioceno en el que se encontraron formas extinguidas. Para los indios era un recurso alimentario: los cazaban escarbando con palos en las cuevas o inundándolas con agua para obligarlos a salir y matarlos con un palo con punta de hueso, también los mataban de un hondazo o de un flechazo. Luego sacaban las pieles, tensadas en bastidores de madera y las mujeres las sobaban a mano para flexibilizarlas con lasque hacían capas y quillangos que resultaban muy abrigados.
Mastodonte. Mamífero ptoboscideos que habitó la  zona hace 20 millones de años. De tamaño casi el doble de los elefantes, dos incisivos prolongados y dos más cortos.  Ilustración:  Ciacciarello, 1996.

El ñandú que es el ave más grande de nuestra pampa alcanza hasta 1,40 m de altura. Habita preferentemente en campos abiertos de pastos altos o matorrales que le permiten ocultar su cuerpo a los depredadores y visualizarlos fácilmente gracias a su largo cuello y visión. Los querandíes, utilizaban las boleadoras corriendo a la par del animal hasta cansarlo. Cuando incorporaron el caballo organizaban cacerías colectivas rodeando a las tropillas de ñandúes para derribarlos con las boleadoras. También incendiaban pastizales corriéndolos hacia lugares donde los aguardaban armados de lanzas, mazas o flechas.

Facsímil Diario Popular del 8-5-1994. Personal del Museo de Merlo y del Museo de La Plata realizaron hallazgos de restos fósiles prehistóricos.  (Archivo Museo de Ciencias Naturales de Merlo).
En tanto el gato montés que también habitaba la zona, con la llegada de los españoles se refugió en las Sierras de Tandil y de la Ventana.
Megatherium. Extinguido hace 10.000 años. Caminaba lentamente en cuatro patas, se levantaba sobre sus patas traseras. Las mandíbulas alojaban una larga lengua que utilizaba para sujetar hojas. Se erguía para alcanzar las copas de los árboles y con las garras largas de sus manos reunía las hojas. Ilustración: Ciacciarello, 1996.




CORRIENTES DE POBLAMIENTO Y HABITANTES PRIMITIVOS
El poblamiento primitivo de América se llevó a cabo sobre la base de distintas corrientes provenientes de Asia y más recientemente de Oceanía ya que el hombre no es originario de América.
Estas corrientes de poblamiento se conformaron con infinidad de individuos en el transcurso de miles de años que en sucesivas oleadas migratorias se fueron distribuyendo por territorio americano.
La zona que ocupa nuestro país, al igual que el resto de América o como sucediera en Europa, conoció poblaciones con distintas etapas de desarrollo cultural; ellas son las correspondientes al paleolítico superior, mesolítico, neolítico y el período conocido como el de las primitivas civilizaciones. (5)
En la Argentina prehistórica se desarrollaron los mismos tipos raciales y períodos culturales que en el resto de América.
Las poblaciones de origen paleolítico en Argentina fueron tres, pudiéndose calcular su antigüedad a través de los restos arqueológicos hallados en 10.000 años aproximadamente.
Los huárpidos hacia el oeste, patagónicos al sur, láguidos al norte.
En las poblaciones de origen mesolítico, es decir, aquellas que iniciaban prácticas agrícolas, se encontraba el grupo racial fueguido con una antigüedad de 4.000 años aproximadamente, ubicados en el extremo sur del continente.
La presencia de poblaciones culturales pertenecientes al neolítico, del grupo racial conocido como asilidos, son más recientes pudiendo calcular su asentamiento en las zonas del río Paraná y chaqueñas, hacia 1.000-1.500 años antes de nuestra era.
Finalmente, los portadores de las primeras civilizaciones, el grupo racial andino, ocupaba lar región andina y tuvo origen con las migraciones provenientes de Polinesia. Fueron los que desarrollaron las altas culturas en América del Sur hacia el segundo milenio antes de Cristo, destacándose principalmente en la región andina del Perú.

5         Paleolítico: se divide en 3 períodos: inferior, medio y superior. Es el estadio cultural más primitivo, comienza hacia el fin del cuaternario y se caracteriza por el nomadismo de tribus dedicadas principalmente a la caza, pesca con herramientas y armas realizadas con huesos y piedras.
Mesolítico: Este período es el considerado como transición entre el paleolítico y el neolítico. Se inician las prácticas de agricultura y coincide con un clima templado. Continúa el tallado de la piedra con las mismas técnicas del paleolítico superior; se insinúan los primeros ensayos del pulido de la piedra y las manifestaciones artísticas se reducen a motivos decorativos pintados sobre guijarros, formados por puntos o trazos.
Neolítico: es la primera revolución que transforma la economía humana ya que dio al hombre el control en el abastecimiento de sus alimentos. Comenzó la siembra, cultivo y mejoramiento por selección de hierbas, raíces, arbustos, etc.
Se logró domesticar a ciertas especies animales y unirlas al hombre en la medida que este pudiera darle protección y alimentos. Se desarrollaron economías basadas en el cultivo de cereales que al igual que la ganadería permitía la participación de todos los sectores dela comunidad, no así como en la caza.
Se conforman grupos sedentarios cada vez más grandes y de este período es el uso del hacha, telar y desarrollo de la alfarería.

RIO RECONQUISTA
El Reconquista es un río que excava su cauce en la llanura pampeana, en la zona denominada ondulada. Es un terreno sedimentario de origen  geológico platense, caracterizado por abruptas barrancas y una dilatada terraza.
El agua corre erosionando el terreno blando a su alrededor, dejando al descubierto grandes masas de tierra y piedras. Estas convertidas en pequeños trozos son arrastradas por la corriente y depositadas en el lecho del río.
Los depósitos en las orillas terminan por hacerlas más altas que los terrenos más alejados. Su aspecto es variable y depende fundamentalmente de la consistencia del suelo a través del cual corre.
En épocas normales del río es de un cauce mínimo, pero después de intensas lluvias conforma una corriente de gran caudal de agua.
El río Reconquista pertenece a la Cuenca del Plata y tiene su nacimiento en la confluencia de los arroyos La Choza y Alvarez (partido de General Rodríguez), recibiendo como afluente importante el arroyo El Durazno y en su curso de aproximadamente 48 km también tributan otros arroyos como: Las Catonas, Morón, Horqueta, Basualdo, Saladero, Torres, Gómez, Del Sauce. Su desembocadura permite la unión con el río Luján y el caudal de estos ingresa en los ríos Paraná y de la Plata.
Conocido desde los primeros repartos de tierras realizados por Juan de Garay en la segunda fundación de Buenos Aires, como río de Las Conchas, conservó su nombre hasta el 1º de julio de 1954 fecha en la cual fue modificado por el actual. Ello se debió en homenaje a la reconquista de la ciudad de Buenos Aires, en la cual las tropas encabezadas por Santiago de Liniers desembarcaron en su desembocadura y marcharon hacia Buenos Aires para enfrentar la invasión de los ingleses.
En cuanto al nombre de Las Conchas dado por los primeros conquistadores obedeció a la gran cantidad de estos moluscos que se encontraban en sus orillas.
Abundaba la vegetación hidrófila y en concordancia con los depósitos de conchillas, crecían algunos talas, ceibos y junto a la ribera algunos sauces. Sus aguas eran claras y vivían varias especies de peces similares a las del río Paraná. También era hábitat para nutrias, tortugas, culebras, lagartos y demás animales de llanura.
El cauce del río y particularmente sus orillas constituyen importantísimos yacimientos arqueológicos poco explorados.
Se han encontrado restos fósiles de animales prehistóricos como: smilodon, glyptodon, mastodonte, megaterio entre otros y restos cerámicos de culturas querandíes. Estos últimos se encuentran especialmente en la ribera correspondiente al Municipio de Ituzaingó, por ser las más altas entre su nacimiento y desembocadura.